La Fundació Suñol de Barcelona expone, hasta el 28 de enero de 2012, treinta-y-dos piezas del artista Luis Frangella. Este pintor argentino fallecido en Nueva York en 1990 es uno de los artistas más insólitos y singulares del panorama artístico de los años ochenta. Su trabajo se acerca tanto al expresionismo figurativo de connotaciones lumínicas, como a las abstracciones formalistas en búsqueda del efecto ilusorio de la tridimensionalidad. Gracias al uso de unas gafas bipolares, sus piezas gráficas lineales, de colores rojizos y verdosos, pueden observarse como figuras abstractas de relieves que se acercan y se alejan simultáneamente. A parte de sus experimentos pictóricos y sus esculturas de alambres se halla una pieza en vídeo de poco más de un minuto titulado LOOK (1981). En este autorretrato videográfico Luis Frangella animó veinte-y-cinco fotografías (tipo foto-carnet) de su rostro, situado en diferentes posiciones. Lo hizo mediante zooms y panorámicas de un AED Frame Buffer, una herramienta que, según Peggy Weil, puede controlarse por "either a head-mounted eye-tracking device, body tracking equipments or a joystick". Este último utensilio parece ser el hardware utilizado para disponer y acelerar el tempo de unas instantáneas que, al ponerse en movimiento, recuerdan los experimentos cronofotográficos de Muybridge. El sonido proviene de una voz electrónica, procesada mediante sintetizadores.
El sábado 17 de diciembre habrá una mesa redonda llamada "Luis Frangella. Arquitecte, artista i poeta visual" moderada por Sergi Aguilar, con la participación de Ángel González García, Narciso Abril y Antoni Muntadas.